jueves, 23 de abril de 2020

RESEÑA de Polos opuestos, de Nora Roberts

Hola a todos!

Hoy vengo con un libro que encontré por casualidad. Lo tenía por mi cuarto y reconozco que en plena crisis lectora, cuando has terminado de leer grandes novelas, me vino muy bien para desconectar de otros mundos. Ahí va: Polos opuestos, de Nora Roberts.

NOTA: "Todas mis opiniones son mías, sin copia alguna —mis chorradas sin mis chorradas, son genuinas—, Las imágenes que cuelgo siempre van acompañas del enlace, y las citas de los libros, evidentemente no son míos, son del autor." Con esto quiero indicar que si alguien tiene algún problema me lo puede poner en los comentarios y así sabré qué hay que modificar exactamente o si quieren que quite toda la reseña; eso sí, todas las opiniones, aunque alguna tenga sangre, lo hago con el mayor de los respetos. 

Título: Polos opuestos (Sacred Sins)
Autor: Nora Roberts
Saga: -
Año de publicación: 1987
Género: Ficción; Suspense
Nº de páginas: 384
Editorial: Random
ISBN: 9788415725015



En los días tranquilos del verano, una ola sofocante de calor se convierte en la más grande en la historia de Washington D.C. Pero el tiempo sale de las primeras páginas de los diarios cuando se encuentra muerta por estrangulación a una mujer joven. Junto a ella una nota pone: sus pecados han sido perdonados.

En poco tiempo le siguen dos víctimas y por ello todos los titulares hablan del asesino que han apodado como "el sacerdote". Cuando la policía pide ayuda en su investigación a la renombrada psiquiatra Dra. Tess Court, ella plantea el inquietante retrato de una mente retorcida.

Al detective Ben Paris le importa un comino la mente del asesino pero lo que no puede olvidar es a Tess. Alto, moreno y atractivo, Ben tiene una reputación legendaria con las mujeres, pero la elegate Tess no reacciona ante él como el resto de mujeres que ha conocido; por eso encuentra ese desafío tan tentador.


Digamos que no es un libro que me haya llegado al alma, ni a lo mas profundo de mi ser, pero... se ha dejado leer. Me ha entretenido, ha hecho que me evada... En fin, si ese era el objetivo, está logrado; si Nora Roberts quería otra cosa... entonces no (Aunque dudo que fuera otro el fin de esta novela). Por lo tanto, no encuentro que sea una mala novela teniendo en cuenta que es muy del estilo de esta autora.
«Sus pecados han sido perdonados»
Dentro de la trama de suspense se nota muchísimo el componente romántico e incluso... «ñoño», si me lo permitís. Vamos, que hubo partes en las que casi se me sube el azúcar como si me hubiera comido una palmera de chocolate de la máquina de mi oficina en plena crisis de ansiedad... Eso sí, la trama policial me ha gustado mucho y eso es un plus. Tu dame un par de polis, un caso y algo de intriga y me tienes ahí... Eso sí... tiene algunas carencias, pero lo dicho, creo que es el estilo de la autora.



Sobre el caso planteado, la trama en si... como he dicho tiene carencias, pero porque estoy muy acostumbrada a novelas de intriga con un alto grado de voltaje; es normal que un escritor mas ligado al género romántico que al suspense tenga alguna dificultad o le quede mas light de lo habitual, pero no creo que sea reseñable, al menos negativamente. Mas bien me lo tomo como un añadido en la novela. Una vuelta de tuerca y un intento que no le ha quedado mal.

Desconozco si esta novela tiene algún tipo de continuación... diría que no... pero si lo sabéis, me lo podéis decir en los comentarios.
«A la fría luz de la cocina sus facciones se veían duras, incluso peligrosas. También es cierto que estaba pensando en un asesinato. Su cuerpo al desnudo, flexible y anguloso, era tan delgado que habría parecido esquelético sin las sutiles curvas de su musculatura. El café no le quitaría el sueño. Cuando tuviera la cabeza despejada, su cuerpo respondería sin vacilar. Las interminables noches de vigilancia policial lo habían entrenado para ello.»
Sobre el final, el responsable de todo... el malo malíiisimo, el «Big Bad» de todo esto... pues lo adiviné a la primera, en cuando salió por primera vez en escena, pero me he quedado un poco igual... vamos, que estaba mas pendiente de cómo salvaban los muebles que de quién era el responsable de todo y el motivo oculto. De hecho, este libro lo leí hace unos meses (si... ya sabéis mi problema de tiempo) y no puedo indicar nada que se me quedase grabado en la mente como algo que me llenase o me sorprendiese y que fuera importantísimo decir en esta reseña. (Y... esto dice mucho)



La ambientación es correcta aunque no da muchos detalles. No creo que sea una novela de grandes descripciones que hagan que te enamores del entorno o que quieras vivirlo en persona. Sorry... Aunque para defensa de la autora diré que Washington D.C. no creo que dé para mucho mas en este tipo de novelas Romantico-Suspense... ¿Qué podría haberlo intentado? Si... ¿Lo ha hecho? En mi opinión no mucho...
«—Quiero saber por qué desconfía tanto de mi profesión
—¿Por qué quiere saberlo?
[...]
—Curiosidad. Deformación profesional. Al fin y al cabo, los dos trabajaremos buscando respuestas, resolviendo rompecabezas.
—¿Le parece que nuestros trabajos tienen algo en común? —Le entraban ganas de reír solo de pensarlo—. Polis y loqueros.
—Puede que su trabajo me parezca tan desagradable como a usted el mío —dijo sin acritud—. Pero,  mientras la gente no se adecue a lo que la sociedad clasifica como patrones de conducta normales, ambos seguirán siendo necesarios.
—No me gustan las clasificaciones— respondió Ben inclinando su copa hacía atrás—. No me fío de una persona que se sienta ante un escritorio a examinar el cerebro de otra y luego encasilla su personalidad en un compartimento.»
Sobre los personajes, Tess me ha gustado. Pensaba que iba a ser más agresiva con Ben pero al final no lo ha sido tanto y de hecho se ha convertido en una «ovejita» desvalida. Bueno... puede pasar cuando una persona intenta aparentar ser otra. Él, sin embargo, es el típico sabueso «duro de roer» y mujeriego; vamos, un «topicazo» del género, pero vale, lo aceptamos porque me cae bien, tiene sus luces y sus sombras y digamos que tiene un pasado que hace que sea coherente su malestar hacía los psiquiatras. Podría haber intentado sacarle cosillas malas pero no había demasiadas. ¿Con esto qué quiero decir? Que los personajes no enamoran; es decir, que están bien descritos, pero para mi gusto les falta encanto en sus descripciones, en su prosa.



Sobre el final, no me voy a ir por las ramas -> Es malo... o sea... casi lloró de lo malo que es, pero no puedo esperar un final de infarto en una novela policíaca y romántica a la vez con todo lo anteriormente comentado. Tampoco sería coherente que el final de la novela fuera buenísimo si el resto ha sido normalito. Para ser buena diré que es un final. Había que terminar de alguna forma y a la autora le ha parecido bien hacerlo así. Lo respeto. Eso sí... es un final de peli de Antena3 los sábados a medio día...


Tess Court: Psiquiatra famosa a la que la policía llama para ayudarles a resolver un caso de asesinato en la ciudad. Su carácter choca inmediatamente con el del detective al mando del caso.

Ben Paris: Detective responsable de esclarecer la ola de asesinatos en la ciudad. Impulsivo y mujeriego, choca con el carácter de la doctora Tess, y a la vez, teme por su seguridad.

Y mi valoración es:


Calificación:

Aunque en Goodreads aparezca un 3, es mas bien un 2.5 (no se pueden poner medias). Un 2 me parecía poco para un libro que, a mi entender, cumple con su cometido, que es entretener al lector. Otra cosa es que yo esté MUY acostumbrada a lecturas MUY espesas. Por lo tanto, voy a dejar 2.5 que es un aprobado raspadete.


Y con esto me despido por hoy. Como veis, aunque tarde voy sacando todas las reseñas adelante; eso es todo un logro!!!

Espero veros pronto.

Hasta la próxima!

1 comentario :

  1. Menudo desastre de lectura, aún me parece alta la nota que le has dado. Siempre me sorprende encontrarme a esta autora en el género, me parece que no le pega en absoluto, solo la romántica, aunque está bien que lo intente. Qué mal que no te convenza la prosa ni los personajes, y que además el final sea tan malo y el villano previsible.

    Mi pésame,
    Laura.

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